El exagente retirado había realizado funciones de escolta para cargos del Consell hasta el año 2008 entre otros servicios.
El exagente de policía jubilado que se encontraba atrincherado desde la mañana del miércoles en Alzira (Valencia) y que presuntamente habría asesinado a su exmujer antes de quitarse la vida, no ha respondido a los intentos de comunicación del equipo negociador desde que comenzaron las negociaciones, según lo confirmó la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Pilar Bernabé, en declaraciones a los medios.
A lo largo del día, agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo un operativo policial y movilizaron a efectivos del GOES (Grupo de Operaciones Especiales de Seguridad), junto con el equipo negociador de la Jefatura Superior, recursos aéreos y agentes de la Comisaría de Alzira. Según información de la Jefatura, había preocupación de que el hombre pudiera estar armado.
Finalmente, agentes de la Policía Nacional encontraron los cuerpos sin vida del hombre y la mujer en el interior de la vivienda en Alzira, donde el hombre había estado atrincherado desde la mañana.
Tras la confirmación de la muerte de ambas personas por parte de los efectivos del GOES, investigadores de la Policía Científica y el grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia ingresaron en la vivienda para llevar a cabo la identificación de los cuerpos.
De acuerdo con la versión proporcionada por la familia, la víctima había acudido el miércoles a la casa junto con un hijo de otra relación para recoger ropa y objetos personales que necesitaba, ya que la pareja se había separado después de 12 años de matrimonio.
Fuentes adicionales consultadas sugieren que la exmujer había acudido a la vivienda acompañada por un agente inmobiliario y su hijo. En un principio, el exagente retirado habría retenido a los tres en la casa, aunque posteriormente los dos hombres lograron salir.
No estaba respondiendo.
Detalló Bernabé, refiriéndose al presunto autor del incidente, indicando que no respondió a los intentos de comunicación del equipo negociador desde el inicio de las negociaciones. Además, precisó que cuando los agentes entraron en la vivienda, ambas personas ya estaban fallecidas y presentaban heridas «incompatibles con la vida«.
Según testimonios de testigos presenciales, el exagente retirado y la víctima habían sido pareja y habían pasado por un proceso de separación. Bernabé señaló que si se confirma este hecho, se tomarán las medidas necesarias para informar a la Delegación del Gobierno contra la Violencia de Género.
La delegada del Gobierno también informó que, según los testimonios de testigos presenciales, otras dos personas se encontraban en la vivienda. En un momento determinado, salieron de la casa y alertaron sobre los disparos, que se habían escuchado al comienzo del incidente.
Bernabé agregó que los investigadores estaban en proceso de identificación y confirmación de la identidad de las personas fallecidas, por lo que instó a la prudencia hasta que se completara este proceso. Finalmente, confirmó que no había denuncias previas y que la mujer no estaba registrada en el Sistema de Seguimiento Integral en casos de Violencia de Género (VioGén).
El exagente retirado, que tendría alrededor de 70 años, había servido en la Policía Nacional y posteriormente en la Unidad del Cuerpo Nacional de Policía Adscrita a la Comunitat Valenciana (Policía Autonómica). Desde allí, desempeñó funciones de escolta para cargos del Consell hasta el año 2008.
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