Como ya se había anunciado desde hace semanas, D. Casimiro López Llorente tenía la intención de celebrar una Misa funeral por los difuntos de la pandemia del coronavirus en la Diócesis.
Con las condiciones sanitarias que ya hacen posible un acto como este, se ha fijado la fecha: será el sábado 27 de junio a las 11h en la Concatedral de Santa María, en Castellón. Paralelamente, Segorbe-Castellón secundará la iniciativa tomada desde la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Española (CEE) de organizar Jornada por los afectados de la pandemia.
El 26 de julio se propone que en todas las parroquias e iglesias de la Diócesis se haga memoria en las Eucaristías de los afectados y las familias que han sufrido de una manera especial los efectos de la pandemia. Ese día es la fiesta de San Joaquín y Santa Ana, patronos de los ancianos, el grupo social más golpeado por el virus.
Además de celebrar la Eucaristía ofreciéndola por el eterno descanso de todos los difuntos y el consuelo y esperanza de sus familiares, la Comisión Ejecutiva de la CEE también propone que la jornada del 26 de julio sea la ocasión de «dar gracias por todo el trabajo y sacrificio realizado por tantas personas en los días más duros de la pandemia, rogar de una manera especial por los mayores y residencias de ancianos, y pedir luz, comunión y entrega fraterna ante la crisis social y económica provocada por la pandemia y el confinamiento».