La transformación integral del Muelle de la Cerámica de PortCastelló encargada a Noatum hace necesario el desmantelamiento del emblemático faro del puerto, ya que su emplazamiento actual dificulta la realización del proyecto, al encontrarse en el punto central del muelle.
Es por ello que la compañía ha confiado a Gimecons las obras de ejecución del nuevo faro, que ya han dado comienzo -cumpliendo así con los compromisos de inversión de Noatum con el Puerto- y que se prevé concluir el próximo mes de enero.
El nuevo faro, que estará ubicado al borde del mar, estará compuesto por un núcleo continuo de hormigón de 30 metros de altura y 3 metros de diámetro sobre una cimentación formada por micropilotes de 18 metros de profundidad. En los trabajos se incluye, además, la recuperación y montaje de la instrumentación existente en el faro actual, como la linterna, el cerramiento que aloja la lámpara y el sistema óptico capaz de amplificar la fuente de luz para que pueda verse desde largas distancias.
De esta manera, la nueva construcción supone un paso más en la larga historia de los faros de PorCastelló, que se remonta a 1867, cuando era solo una construcción con una faroleta que servía para iluminar el fondeadero que albergaba entonces el Grao
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Tras él, se inauguró un nuevo faro en 1917, ubicado originariamente en el dique de contención de PortCastelló, donde estuvo proyectando su luz hasta principio de los años 70 del pasado siglo. Este fue trasladado piedra a piedra dando lugar al más conocido, que sufrió también varias remodelaciones debido precisamente a las sucesivas ampliaciones del puerto.