En política, como en la vida, las cosas no suceden de hoy para mañana si exceptuamos las continuas improvisaciones y rectificaciones de nuestro Gobierno actual.
VOX, a pesar de que la mayoría de la prensa se empeña en señalarlo como “un bicho raro”, funciona como el resto de partidos políticos y no está libre, como reiteradamente se ha demostrado en otras fuerzas políticas, de las divisiones internas.
El respeto a las decisiones personales debe estar por encima de todo, a pesar de que se impone por mayoría la moda de salirse de un partido y conservar el acta de concejal o diputado como tuya propia olvidando quien te concedió la confianza necesaria para ocupar el puesto que ocupas.
Este comentario se debe a que la salida de VOX de su hasta ahora concejal en el Ayuntamiento de Benicássim es un episodio político más de los muchos casos “tránsfuga” que hemos vivido, con la sola diferencia de que de VOX sí se puede hacer leña, cuanto más mejor, por orden de los que pagan.
Contrasta, no me lo podrán negar, la naturalidad con la que se ha tratado en los medios el abandono del concejal de Ciudadanos en el mismo ayuntamiento con como los mismos medios se “han tirado a la yugular” de VOX en cuanto han olido la sangre.
Nada que objetar a la decisión del hasta ahora concejal benicense de VOX, solamente, tras consultar opiniones allegadas al partido de Abascal en Castellón, se le puede acusar de no decir la verdad a la hora de justificar su decisión.
El edil tiene total conocimiento de los motivos, sobradamente justificados, por los que el Comité Ejecutivo Provincial de VOX cesó en su cargo al coordinador de la localidad.
Las mismas fuentes aseguran que el final estaba anunciado, ya que el edil y su equipo jamás asumieron la línea política del partido ni acataron nunca la disciplina del mismo. Es más, en las RRSS se pueden encontrar críticas y comentarios negativos, muy habituales, sobre la organización provincial de VOX, vertidos desde los miembros del equipo del hasta ahora único representante de VOX en el consistorio benicense.
En VOX niegan cualquier tipo de crisis y asumen la marcha de José Carlos García como un episodio ya habitual en política y como algo esperado. Los círculos cercanos a Llanos Massó, Presidente Provincial de VOX, aseguran que no ha sido ninguna sorpresa.