El cuerpo pasará a contar con un total de nueve dispositivos distribuidos estratégicamente para optimizar su disponibilidad y uso.
La Policía Local de Castellón ha dado un importante paso en la mejora de su equipamiento con la adquisición de cinco nuevos desfibriladores semiautomáticos externos (DESA). Estos dispositivos, que se instalarán en vehículos policiales, reforzarán la capacidad de respuesta rápida del cuerpo ante emergencias, especialmente en situaciones de parada cardiorrespiratoria, mejorando así las probabilidades de supervivencia de los afectados hasta la llegada de los servicios médicos especializados.
Hasta ahora, la Policía Local contaba con cuatro desfibriladores: dos instalados en vehículos de patrulla, uno en el hall central y otro en la subcentral del Grao. Con la incorporación de los cinco nuevos desfibriladores, el cuerpo pasará a contar con un total de nueve dispositivos distribuidos estratégicamente para optimizar su disponibilidad y uso.
El concejal de Seguridad y Emergencias, Antonio Ortolá, ha destacado la importancia de esta inversión al señalar: “Estos nuevos desfibriladores refuerzan la capacidad de nuestra Policía Local para actuar con rapidez y eficacia en situaciones críticas. Dotar a los agentes de herramientas como estas es esencial para garantizar una respuesta inmediata en emergencias médicas y proteger la vida de los ciudadanos de Castellón”.
El edil también ha explicado,
Esta adquisición forma parte del nuevo plan de inversión que se está llevando a cabo para equipar a la Policía Local con las mejores herramientas posible.
Ortolá recordó que recientemente se incorporaron nuevos uniformes para los agentes, y que en el futuro se seguirán añadiendo más novedades para reforzar su capacidad de actuación y contribuir a garantizar la seguridad de los castellonenses.
La compra de los desfibriladores, que cumplen con la normativa vigente, se ha realizado mediante un contrato menor con un importe total de 7.984,79 euros.
En sus declaraciones, Ortolá no pasó por alto la situación anterior del cuerpo: “La realidad es que, durante años, la Policía Local ha estado prácticamente abandonada por el anterior gobierno, con una falta evidente de inversión en recursos básicos. Nosotros estamos trabajando para revertir esa situación y dotar a nuestros agentes de todo lo necesario para que puedan desempeñar su labor con eficacia y profesionalidad garantizando la seguridad de todos los castellonenses”. Concluye.