El retablo de hoy se distingue por su parte final, que es más humorística y festiva en comparación con el resto del novenario sexenal.
Morella ha culminado los nueve días de festividades en honor a la Virgen de Vallivana, patrona de la ciudad. En esta jornada del 55º Sexenni, la juventud morellana asumió el protagonismo al organizar los eventos del día. Mañana, el Sexenni llegará a su fin con el desmontaje de las decoraciones de las calles y un día dedicado a recordar a los difuntos.
El Gremi de la Joventut, que incluye desde los más pequeños hasta personas de alrededor de 40 años, es uno de los grupos más numerosos. Su principal contribución al programa festivo es la danza de las Gitanetes. Esta danza, que involucra a ocho jóvenes de unos 18 años y un chico que porta un palo, presenta una coreografía en la que las Gitanetes entrelazan cintas al ritmo de dulzainas y tabales, creando imágenes visuales encantadoras. Las vestimentas y los peinados son coloridos y originales.
El programa del Gremi de la Joventut culmina con la actuación de las Gitanetes. En su tramo final, el espectáculo adopta un tono más humorístico y festivo, intercambiando danzas y escenas bíblicas para celebrar su día. Prácticamente todos los participantes en el retablo pertenecen al gremio juvenil. Así concluye el novenario festivo del Sexenni, que no se repetirá hasta el año 2030.
