La Unión Europea ha activado el mecanismo de Respuesta Política Integrada a las Crisis (IPCR) por el conflicto bélico en Oriente Próximo.
Los ministros de Interior de la Unión Europea se han reunido este jueves para abordar un tema de gran preocupación: la posibilidad de que la violencia en Oriente Próximo tenga repercusiones en el aumento de la radicalización y polarización en los países de la Unión Europea, lo que podría representar un riesgo para la seguridad nacional.
El ministro español de Interior y presidente de turno del Consejo, Fernando Grande-Marlaska, destacó
Inquietud sobre la radicalización y polarización en un contexto de violencia en Oriente Próximo.
Esta discusión se incluyó en la agenda de la reunión a 27 después de que el conflicto en la región se recrudeciera, con un elevado número de víctimas tanto en Israel como en la Franja de Gaza. Además, se produjeron ataques terroristas en Francia y Bélgica que conmocionaron a la Unión Europea.
Los ministros se propusieron analizar las posibles consecuencias para la seguridad interna de la Unión Europea, considerando la hipótesis de que la tensión en Oriente Próximo pudiera impulsar polarizaciones en el espacio comunitario y fomentar delitos de odio.
Grande-Marlaska subrayó la importancia del trabajo preventivo que ya se lleva a cabo en los países de la UE.
El vicepresidente de la Comisión Europea responsable de migración, Margaritis Schinas, también hizo hincapié en la necesidad de proteger a las comunidades judías en la UE y evitar la propagación de la islamofobia en la sociedad europea.
Además de la amenaza de acciones yihadistas, se expresó preocupación por el extremismo de la ultraderecha en Europa, que ha difundido amenazas en las redes sociales.
Si bien no se esperaban conclusiones concretas de la reunión de ministros, esta sirvió como punto de partida para compartir información sobre las medidas que están tomando los países miembros y evaluar los riesgos percibidos.
La Unión Europea ha activado el mecanismo de Respuesta Política Integrada a las Crisis (IPCR) para hacer un seguimiento continuado de la situación en Oriente Próximo. Expertos nacionales se reunirán para abordar diversos aspectos de la crisis, incluyendo su impacto en la seguridad nacional de la UE, la coordinación de la ayuda humanitaria y la asistencia consular a europeos en la región. Este formato permitirá una coordinación efectiva y un seguimiento constante de la situación.
