Empleo, protección, ayuda social y contratos a empresas locales centran los fondos
El Ayuntamiento de Almassora acumula tres millones de euros en gastos e inversiones vinculadas a la pandemia cuando se cumple un año de la declaración del primer estado de alarma. Elementos de protección en instalaciones, desinfección de la vía pública, reactivación del empleo, contratación de empresas locales, ayudas directas, emergencia social y becas comedor para escolares son algunas de las líneas activadas en este primer año de impacto del coronavirus.
El Servicio de Información y Atención Ciudadana (SIAC), la Policía Local y los Servicios Sociales han sido la primera línea en este tiempo de incertidumbre y dificultades económicas y sociales. Acortar los plazos de pago de las ayudas, ofrecer nuevos servicios a domicilio, gestionar un ‘teléfono de la esperanza’ para mayores… La previsión económica para 2021, tras el impacto de la pandemia, ha llevado al equipo de gobierno a incrementar un 35% el presupuesto de Servicios Sociales, que superará el medio millón de euros entre 2020 y el ejercicio vigente para no dejar a nadie atrás.
Evitar esa situación fue también el principal objetivo del Plan Reactivem, de carácter municipal, que durante 2020 destinó 308.666,20 euros a contratos a empresas de Almassora que pusieron a punto la ciudad con fondos públicos y permitieron mantener a flote su actividad en un momento de caída del negocio en casi todos los sectores. Garantizar su continuidad fue el principal propósito del trabajo de todos los gestores que lograron reducir a 14 días el periodo medio de pago a los proveedores del Ayuntamiento.
El objetivo sigue vigente en la actualidad, sin ir más lejos con obras de accesibilidad que ejecuta estos días una empresa local en la calle Alquería y que contribuyen a mejorar la imagen de Almassora y la continuidad de la actividad empresarial. Por ello, dentro de las competencias municipales de fomento del empleo, el presupuesto municipal para 2021 recoge 1,3 millones de euros en seis programas de empleo que ofrecerán formación y trabajo a tantas personas en busca de una oportunidad laboral, que se suman a planes de empleo por 500.000 euros el último año y más de un millón en acciones formativas.
Mientras, el plan Resistir, en el que participan la Generalitat, la Diputación y el Ayuntamiento, inyectará 649.487 euros a negocios que se han visto obligados a cerrar y el consistorio hará lo propio en las próximas semanas al reservar 300.000 euros para otra línea de ayudas que alcance a autónomos y empresas que, sin tener que bajar la persiana, sí vieron afectados gravemente sus ingresos. La ayuda irá más allá a la hostelería con la eliminación de la tasa de terrazas en este año y la reducción en el caso del mercado ambulante. Más de 200.000 euros que el Ayuntamiento dejará de ingresar entre el año pasado y éste para ayudar en la recuperación.
Y con este fin se sitúan las inversiones como eje central del presupuesto municipal de 2021, para seguir generando trabajo y también la protección para evitar más contagios. De ahí que el presupuesto para la residencia municipal de la tercera edad crezca este año en 108.000 euros respecto al anterior para ofrecer las mayores garantías a la plantilla y a las personas usuarias, que fueron pioneras en el proceso de vacunación en la provincia.