Los médicos involucrados son dos profesionales del centro de salud de Viver, además de una médica y el coordinador del servicio de urgencias del Hospital de Sagunto.
El Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Sagunto, en la provincia de Valencia, ha citado para el próximo 4 de diciembre a cuatro médicos, quienes comparecerán en calidad de investigados por un presunto delito de homicidio imprudente. Esta situación está relacionada con la atención sanitaria proporcionada a una menor de Jérica, en Castellón, quien falleció el 6 de febrero de 2023 debido a una peritonitis.
Los padres de la niña relatan que ella presentaba molestias y dolor en el abdomen, pero el centro de salud la envió a casa en dos ocasiones consecutivas. La madre había señalado que había antecedentes familiares de apendicitis. Días después, al no observar mejoría en su condición, la llevaron a Urgencias del Hospital de Sagunto, donde afirman que únicamente se le realizó un análisis sin realizarle una ecografía, a pesar del intenso dolor que padecía.
Al día siguiente, su estado se agravó, y en el centro de salud de Viver perdió el conocimiento. Fue entonces trasladada al Hospital Clínico de Valencia, donde falleció antes de poder ser intervenida quirúrgicamente.
Los médicos implicados incluyen a dos profesionales del centro de salud de Viver, así como a una médico y al coordinador del servicio de urgencias del Hospital de Sagunto. Esta información ha sido confirmada por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
La investigación se inició en un juzgado de Valencia, específicamente en el de Instrucción 18, pero en marzo de este año, el juez correspondiente decidió inhibirse en favor de los Juzgados de Sagunto, considerando que este partido judicial era el competente para continuar con el proceso.
Un informe forense, solicitado por la Fiscalía Provincial de Valencia, concluyó que el servicio de Urgencias del Hospital de Sagunto no cumplió con la ‘lex artis’, es decir, la obligación de actuar con la debida diligencia que exige la profesión médica. La familia de la niña denunció que, a pesar de llevar a su hija en varias ocasiones tanto al centro de salud de Viver como al hospital, no se realizaron pruebas diagnósticas ni se detectó la gravedad de su condición, lo que finalmente llevó a su trágico deceso.
