La noche fue un viaje emocional a través de las notas y las voces que han sido transmitidas de generación en generación
Este sábado, 3 de agosto, el Anfiteatro Pepe Falomir de Benicàssim se convirtió en el epicentro de la tradición marinera con la celebración de la XXXVII edición de la velada de habaneras. Este encuentro anual, que se ha consolidado como una cita ineludible para los amantes de la música y la cultura, reunió a un público fiel que llenó el anfiteatro, creando una atmósfera mágica junto al mar.
La velada contó con la actuación de tres grupos destacados: Canya de Sucre de Benicàssim, Grills de la Nit de Castellón y Els Pescadors de l’Escala. Cada uno de ellos ofreció una interpretación única de las habaneras, esas canciones que, con sus melodías nostálgicas y letras evocadoras, rinden homenaje a la historia y las tradiciones marineras de la costa levantina.
Las habaneras, con su origen en los ritmos de ida y vuelta entre España y América Latina, se han convertido en un símbolo de identidad cultural en la región. La fidelidad del público a esta tradición musical demuestra el valor que se le otorga a la preservación de estas melodías, que siguen resonando en los corazones de quienes viven cerca del mar y de aquellos que se sienten atraídos por la riqueza de su legado histórico.
La noche fue un viaje emocional a través de las notas y las voces que han sido transmitidas de generación en generación. Cada interpretación no solo deleitó a los asistentes, sino que también reforzó la importancia de mantener vivas estas costumbres que forman parte del patrimonio cultural de Benicàssim y de toda la costa levantina.
La XXXVII velada de habaneras en el Anfiteatro Pepe Falomir no solo fue un éxito en términos de asistencia, sino que también reafirmó el compromiso de la comunidad con la conservación de sus tradiciones más queridas. Una noche inolvidable que dejó a todos con el corazón lleno de música y el espíritu conectado con el mar.