Ubicada entre el núcleo urbano de Onda y el río Sonella, la casa de Safont se distingue por su singular arquitectura.
El Ayuntamiento de Onda refuerza su compromiso con la preservación del patrimonio cultural local al recuperar la casa del célebre ceramista y artista ondense Manolo Safont. Esta vivienda, construida en 1888 por un marino mercante de la familia terrateniente Emo-Liñán, fue adquirida en 1978 por el matrimonio formado por Safont y Anita del Moral. Tras años de abandono, la propiedad ha sido rescatada gracias a las gestiones impulsadas por el Museo del Azulejo – Manolo Safont, en colaboración con el equipo de gobierno liderado por la alcaldesa de Onda, Carmina Ballester.
La alcaldesa, junto al concejal de Cultura, Daniel Álvaro, y otros miembros del equipo, visitó la casa para evaluar su estado y presentar el proyecto de restauración y adecuación. Este plan busca convertir la vivienda en una casa-museo abierta al público, dedicada a promover el arte y la cultura local. Ballester destacó la trascendencia de este proyecto, afirmando: “Lo que es de los ondenses debe quedarse en Onda. Recuperar el legado de Manolo Safont es un homenaje a su vida y obra, y reafirma nuestro compromiso con la conservación y valorización del patrimonio cultural que define nuestra identidad”.
La restauración de la casa no solo cumple con el deseo del artista de que su hogar se convierta en un espacio de inspiración para futuras generaciones, sino que también ofrecerá a los vecinos y visitantes de Onda un nuevo centro cultural y artístico. Este lugar albergará actividades que fomenten el legado de Safont y acerquen su obra a un público más amplio, consolidando aún más su impacto en la escena cultural de la localidad.
Manolo Safont
Manolo Safont fue un ceramista y artista de renombre cuya obra trascendió las fronteras de la Comunidad Valenciana, convirtiéndose en un referente internacional en el ámbito del arte cerámico. Su pasión por la tradición y la innovación contribuyó al prestigio de la cerámica de Onda, y su legado perdura a través del Museo de Cerámica de Onda, institución que él mismo fundó y que ahora lleva su nombre. La ciudad natal de Safont, profundamente marcada por su amor al arte y su contribución cultural, le rinde homenaje restaurando su histórica casa como símbolo vivo de su legado.
Ubicada entre el núcleo urbano de Onda y el río Sonella, la casa de Safont se distingue por su singular arquitectura. El edificio principal, de dos plantas, cuenta con dos torres abuhardilladas añadidas posteriormente, que aportan un carácter único a la construcción. Su interior es un testimonio del talento artístico y estético de la época, con elementos como pinturas murales religiosas, pavimentos, y zócalos de azulejos ondenses de finales del siglo XIX e inicios del XX.
En la planta baja se encuentra la vivienda, mientras que la planta superior albergaba el taller de cerámica de Safont, un espacio donde el artista creó muchas de sus piezas más emblemáticas. El entorno de la casa se completa con un jardín frondoso, enriquecido por árboles traídos por el propietario original, que durante años brindaron inspiración y serenidad al ceramista. La restauración de esta vivienda no solo preservará su valor histórico, sino que también consolidará su lugar como un punto de encuentro cultural para las generaciones presentes y futuras.