PSPV reclama acción urgente ante la plaga de mosquitos

PSPV reclama acción urgente ante la plaga de mosquitos

Jiménez denuncia la ineficacia de las fumigaciones y la falta de coordinación con los ayuntamientos, alertando sobre el impacto negativo en el turismo y el bienestar de la provincia.

 

La diputada del PSPV en la Diputación de Castellón, Maria Jiménez, ha criticado duramente a Marta Barrachina, acusándola de perder el control sobre la plaga de mosquitos debido a su «incapacidad total» para abordar el problema. Jiménez señaló que las picaduras y molestias causadas por la proliferación de larvas en áreas sin tratamiento han generado una situación que «se ha desbordado por completo», especialmente en la zona de la Plana. Además, afirmó que las medidas tomadas hasta el momento han sido «insuficientes».

Según Jiménez, «las fumigaciones se están llevando a cabo de manera muy lenta, la falta de coordinación con los ayuntamientos es evidente, y los tratamientos aéreos, que el PP defendía en la legislatura pasada, brillan por su ausencia». Añadió que «parece que han desistido».

La diputada socialista expresó su preocupación por la «pasividad» de la Diputación ante la plaga, subrayando que este problema no solo afecta la imagen turística de la provincia, sino que también representa un riesgo para la calidad de vida de los ciudadanos de Castellón.

Jiménez también recriminó al PP por seguir argumentando que las competencias de la Diputación son «limitadas» para tratar este asunto, calificando esa justificación de «inaceptable». Recordó que, cuando estaban en la oposición, Barrachina criticaba al PSPV por lo mismo, a pesar de que se fumigaba más que nunca. Ahora, en el gobierno, acusó a Barrachina de evadir sus responsabilidades, centrando más su atención en «renovar su despacho con un coste de miles de euros» en lugar de gestionar esta crisis sanitaria.

Por último, Jiménez instó a Barrachina a «asumir sus responsabilidades, intensificar las fumigaciones y tomar medidas inmediatas» para controlar una plaga que ha alcanzado «niveles alarmantes». Concluyó diciendo que no se puede seguir ignorando el problema mientras la salud pública y el bienestar de la provincia están en riesgo.

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