Las artes escénicas y circenses, el juego y la reflexión desfilarán por La Bambolina, El Giocódromo y El Cuórum, los 3 nuevos escenarios que concretan la simbólica área Magicomundo.
La Teen Yard, para el público adolescente, amplía espacio y renueva al completo su pista de skate con la integración de una ‘miniramp pro’.
El festival internacional reggae Rototom Sunsplash prosigue lanzando novedades para su edición dos mil veintidós, la del rencuentro, que cuidan y empoderan su perfil más familiar en pleno circuito de conciertos de Benicàssim.
En la reapertura de la actividad cultural tras la pandemia, la macrocita musical anuncia una unión de talentos para llenar de contenido y estimular uno de los epicentros para el público pequeño y sus acompañantes. Magicomundo va a salir este año a escena bajo el binomio Rototom y Formiguer, un nuevo proyecto este último integrado por el equipo del simbólico Formigues Festival, y que plasma la simbiosis entre dos grandes festivales de Benicàssim referentes además de esto en la promoción cultural en formato mini.
Este tándem se aúna a la transformación que lleva tácito el eslogan dos mil veintidós del festival, ‘We must change the world’. Así, la zona más familiar del Sunsplash va a tirar de este hilo para enseñar una reformulación de sus espacios sin cambiar la filosofía que guía desde sus comienzos a Magicomundo:
Promover la inventiva y la imaginación a través del juego libre y espontáneo.
La actividad este año transitará sobre 3 espacios: La Bambolina, dedicado a las artes escénicas y en la que se integrará Rototom Circus; El Giocódromo, un cosmos reservado al juego y la expresión artística; y El Cuórum, que protegido por un espacio cuidado con un agradable domo, se reservará a la reflexión, las charlas, el conocimiento y el reposo.
Por Magicomundo van a pasar las propuestas del proyecto Ciudad Feliz, una Asociación para la Dinamización del Arte Social; el clown con alma de estrella de rock de ‘Olicopter’; ‘Aunch’, la propuesta circense de Abraham Arzate; o los espectáculos femeninos ‘Bambalina’ de la payasa Txetxe Folch, ‘Alma’, de Marta Martín de la compañía Circo Culipardo o los ‘Cantamundos’ de la educadora musical Alba Larrey, aparte de un concierto sorpresa. Asimismo surgirán, entre otras muchas propuestas, los JuegODS, que van a abordar los objetivos de desarrollo sustentable desde el juego; la reputada revista ‘Pantera’ con un taller de nidos; el NatuArte de Baobab Oci Creatiu; o los juegos de El Pájaro Carpintero.
Magicomundo representa esos pequeños cambios, nuevas sumas, mas mismas sinergias que servirán de palanca para ese cambio global que este año es nuestra proclama.
Manifiestan desde el festival.
Novedades que alcanzan asimismo a otro de los espacios familiares del certamen, como es la Teen Yard, el área reservada a las y los adolescentes. Este año está de traslado. Reubica su escenario al lado de Magicomundo, diseñando así un área para el público más familiar en el circuito de conciertos “pero conservando la independencia que demanda el colectivo más juvenil”, agregan desde la organización.
Talleres de radio, iniciación a la fotografía, edición musical y beat box o sesiones de twerk feminista se unen a actividades con conciencia como la que busca desactivar el racismo y la xenofobia por medio de la música como herramienta para prevenir, advertir y sensibilizar sobre las desigualdades e injusticias. Además de esto, este año la zona de skate se renueva por completo con nuevos cooperadores. El colectivo Urbns.Co de Valencia incorpora una miniramp pro, y un equipo de riders va a estar en el espacio para iniciar al público el mundo del skate.
Este triángulo para familias lo cierra el mercado Artesano, que vuelve a desplegar su atrayente escaparate de actividades para mayores y no tan mayores. Día a día este espacio va a abrir sus puertas con el aprendizaje, el entretenimiento y la toma de conciencia en el horizonte, y con los materiales reciclados y biodegradables para crear cosas útiles y bonitas como herramienta para lograr el reto de gozar, cambiando el planeta a mejor.