Desde el interior, se escuchaba una voz que decía "¡Abre!".
La intervención comenzó tras recibir un aviso de la central de alarmas, que alertaba sobre un posible robo en un establecimiento hostelero ubicado en el centro de Almassora.
Una patrulla de la Guardia Civil, que se encontraba realizando tareas de vigilancia como parte del Plan de Lucha contra la Delincuencia, observó desde el vehículo a un hombre agachado junto a la persiana metálica del local. Al notar la presencia de los agentes, el individuo intentó alejarse disimuladamente.
Mientras uno de los agentes interceptaba al sospechoso para verificar su identidad, otro se acercó al establecimiento y notó que la persiana metálica estaba forzada.
Desde el interior, se escuchaba una voz que decía «¡Abre!».
Al ingresar al local, los agentes encontraron el lugar revuelto y descubrieron a una mujer escondida junto a un electrodoméstico de gran tamaño. Como resultado, se procedió a la detención de ambos individuos, un hombre de 40 años y una mujer de 49 años, quienes están acusados de un delito de robo con fuerza.
Entre sus pertenencias, los detenidos llevaban una mochila que contenía destornilladores de distintos tamaños y otras herramientas utilizadas comúnmente para forzar puertas y rejas.
La operación fue llevada a cabo por agentes del Puesto Principal de la Guardia Civil y La Policía Local de Almassora cuyos agentes recibieron un aviso durante la madrugada sobre un posible hurto en un establecimiento, por lo que se dirigieron inmediatamente al lugar.
Al llegar, sorprendieron in fraganti a dos personas, identificadas con las iniciales S.R.G. y A.M.D., en pleno acto de robo dentro del local.
Después de elaborar el correspondiente atestado, los detenidos fueron puestos a disposición judicial.
Desde la Policía Local de Almassora, se recuerda a los vecinos que pueden contactar con los agentes a través del teléfono 964560007 ante cualquier sospecha de actividad delictiva y se agradece la colaboración ciudadana.
Tanto las diligencias como los arrestados han sido entregados al Juzgado de Guardia de Castellón.
Fotografía portada: Archivo Guardia Civil.
