Un año inútil

Un año inútil

Un nuevo comercio de la cadena Inditex cierra sus puertas en la capital de la Plana en una desoladora dinámica de un Castellón que se muere.

 

Lo siento por la directora territorial del Consell, Susana Fabregat, que tendrá una tienda menos para visitar en el centro de la ciudad, ocupación a la que se dedicaba cuando era concejal del PP del Ayuntamiento de Castellón en horas de oficina (hay que ser snob por mucho que vaya con su esposo (profesor de la roja UJI) de progresista), y nunca he entendido la fascinación de la derecha por la cultura de la izquierda.  Pero, así es.

Un nuevo comercio de la cadena Inditex cierra sus puertas en la capital de la Plana en una desoladora dinámica de un Castellón que se muere, que agoniza.

Cuando se cumple el primer año del pacto PP-Vox en el consistorio castellonense, y pese al triunfal balance realizado por ambos partidos (que no pueden disimular sus diferencias), la realidad es otra, salpicada de errores, equivocaciones y, especialmente ausencia de gestión.

Bien es verdad que algo diferencia a los de Abascal con los de Feijóo en Castellón, y además muy importante: considerar el trabajo de concejal como valor moral y social, como un trabajo más al que hay que volcarse, como disciplina calvinista tan necesaria en el poder y en la gobernación. De entrada, la concejalía de Turismo, liderada por Arantxa Miralles, es la que mejor funciona.

La edila, acostumbrada a madrugar, no descansará hasta hacer de Castellón un emporio turístico.

Mientras, Antonio Ortolá, también de Vox comenzó bien en sus funciones, aunque últimamente se nos ha despistado. Vidal y Luciano cumplen su papel. En la bancada popular, Sales no puede con los incendios de la Quadra Borriolench y yo creo que le están tomando el pelo en este tema, entre la especulación y el engaño; en Fiestas, todavía no se ha convocado la asamblea de fiestas para garantizar la autonomía festera, la gran promesa y reivindicación en materia de Magdalena; el pequeño mandarín vuelve a prometer el parque de Sensal, después de 40 años de ayuntamientos democráticos, y como cada día tienen un error, la alcaldesa alicantina de Castellón se reunió ayer con las asociaciones culturales rumanas vinculadas al Partido Popular, despreciando a las que dicen no comulgan con el poder establecido…

Algo bueno, en el equipo del PP, la discreción y la capacidad de diálogo de la concejala de Deportes, Maica Hurtado, como así fue en la elaboración del convenio con el Club Deportivo Castellón.

Un año prácticamente inútil para las expectativas, buenos deseos y futuro de Castellón.

Vicente Cornelles Castelló

Escritor y periodista