PACMA apela al Ayuntamiento de Castellón por permitir eventos que implican crueldad hacia los animales y que no deberían ser permitidos.
El Partido Animalista Pacma ha levantado una voz de preocupación en relación a la reciente exhibición de emboladores que tuvo lugar en las Fiestas del Serrallo del Grau de Castelló.
Durante el evento, un toro salió del toril con una herida notoria y sangrante en el hocico, lo que generó inquietud por el bienestar del animal.
A pesar de su estado, el toro fue sometido a ser ensogado y apresado contra un pilón, continuando así con el desarrollo de la actividad.
Las imágenes de este incidente fueron compartidas en plataformas de redes sociales y corresponden al segundo toro embolado de la noche del lunes. Según el relato presentado por Pacma en un comunicado oficial,
El toro herido atravesó el recorrido durante aproximadamente quince minutos, todo ello mientras era observado por el público asistente.
En un vídeo compartido en redes, se puede escuchar que entre los espectadores también se encontraban niños pequeños.
El origen de la herida en el hocico del toro es desconocido, según informó Pacma. No obstante, la organización plantea la posibilidad de que esta herida haya sido provocada por el propio animal durante su estancia en el cajón, el lugar donde son confinados y mantenidos por varias horas previas al inicio de la exhibición.
Pacma ha destacado con firmeza que el toro no debió ser embolado en tal condición. La organización ha dirigido su llamado a la responsabilidad del Ayuntamiento de Castellón, alegando que eventos de este tipo que involucran crueldad hacia los animales no deberían ser permitidos.