Comerciantes, peluqueros, hosteleros, agricultores, propietarios de gimnasios y en general los autónomos se dieron cita en la Plaza Mayor
Reclamaban las ayudas ya, acusaban al Gobierno de criminalizar ciertos gremios sin ninguna base científica, solo por motivos políticos y llamaban a la unidad para hacer fuerza ante los abusos que han sufrido.
Ha costado, pero parece que la gente empieza a reaccionar y luchar por los derechos y libertades que les han robado.
La reacción ciudadana, quizá paralizada por el confinamiento y las falsas promesas, ha tardado, pero Vila-real ha sido hoy un ejemplo de que algo está cambiando.
La convocatoria la había hecho la asociación de hostelería y ocio de Vila-real, pero allí estaban autónomos de todos los gremios incluido el de los labradores, uno de los más fuertes y representativos de la ciudad.
La cita se repetirá el próximo miércoles hasta conseguir las ayudas, la reapertura de sus negocios y el cumplimiento de la promesas que se les han hecho.
Las velas quedaron encendidas en la Plaza, una por cada comercio de Vila-real que se apaga.