• Es una ley para adoctrinar a los niños • No protege a los niños ni a los adolescentes
José María Llanos, presidente y portavoz adjunto del Grupo Parlamentario VOX en las Cortes Valencianas ha presentado 10 preguntas sobre la Ley 26/2018, de 21 de diciembre, de la Generalitat Valenciana, de derechos y garantías de la Infancia y la Adolescencia.
Llanos hace una valoración política de lo que supone esta ley: » es una ley, como todas las dictadas por el Botànic, sectaria, adoctrinadora, y fuertemente ideologizada. En ella se trata al niño como un adulto, señalando su ciudadanía activa y de pleno derecho, tanto en la esfera privada como en la pública, así como ‘su participación política y económica’. Con esta ley no se cumple ningún mandato moral de protección de la infancia y la adolescencia, sino que se confiere a los niños y adolescentes unas prerrogativas que eliminan cualquier decisión de los padres en su desarrollo integral, y en la formación de su propio criterio».
José María Llanos añade que «Se trata de un instrumento en manos de la izquierda marxista, que quiere construir robots, en lugar de personas que puedan decidir libremente, tras un desarrollo afectivo y social como individuos únicos y con identidad propia, y no como piezas de un ajedrez a los que la maquinaria de la ‘interseccionalidad’ de la izquierda de género, quiere manejar. Con este elemento artificial, se pretende condicionar al ser humano desde su infancia, en la idea de que todo vale, y de que no hay cosas que están bien y cosas que están mal. Se desprecia lo natural y biológico, y se sustituye por lo construido por el hombre, y lo que es peor, por quien ostenta el poder y pretende dominar el pensamiento; como ocurre con esta ley y con todas las del Botànic, fuertemente impregnadas de ideología colectivista, materialista, y nítidamente marxista».
Resulta significativo que se publicara en el DOGV el día de Nochebuena, y entrara en vigor el día de Navidad, y que sea una ley que «hiere de muerte«, una vez más, a la patria potestad de los padres sobre sus hijos menores. También llama la atención que la ley se aprobara con los votos del Botànic, Ciudadanos y con la abstención del PP, «que se puso de perfil».
