Carrasco: “La escasez de material de protección entre sanitarios propicia contagios y la merma de personal que obliga a cerrar centros de salud”

Carrasco: “La escasez de material de protección entre sanitarios propicia contagios y la merma de personal que obliga a cerrar centros de salud”

La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, insiste en la urgencia de suplir las carencias de equipos de protección individual, mascarillas, guantes, tests rápidos y otros materiales que prevengan del contagio del COVID-19 a los sanitarios, cuidadores, cuerpos y fuerzas de seguridad. “Han cerrado hasta 7 centros de salud e por la falta de previsión e improvisación, porque faltan médicos para atender a la población”, explica

“El elevado contagio entre sanitarios en Castellón ha obligado al cierre de estos ambulatorios en la capital ante la imposibilidad de destinar médicos suficientes, porque se han contagiado o están en cuarentena, también las residencias de mayores son un foco de los más sensibles, donde las bajas del personal suponen mermar la atención de los más vulnerables, expuestos sobremanera al contagio por coronavirus y a sus consecuencias más letales. La prevención es la mejor herramienta, por eso, no puede demorarse más el material necesario que siguen reclamando sindicatos y colegios profesionales y Amparo Marco y Ximo Puig deben procurar que llegue de inmediato, mañana será tarde”, añade

La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, lamenta la escasez de material de protección que sigue existiendo entre sanitarios y todos aquellos profesionales que se exponen con su trabajo al riesgo diario de contagio por COVID-19. De hecho, el elevado número de personal sanitario contagiado, ha obligado a cerrar hasta siete centros de salud en la ciudad, al no disponer de médicos suficientes, teniendo que derivar a los pacientes a otros centros de salud, más alejados de sus domicilios, lo que implica mayor movilidad cuando es algo que precisamente desaconseja el estado de alarma decretado por el Gobierno central. En este sentido, Carrasco insiste en la urgencia de suplir las carencias de equipos de protección individual (EPI), mascarillas, guantes, tests rápidos y otros materiales que prevengan del contagio por coronavirus a los sanitarios, cuidadores, cuerpos y fuerzas de seguridad, entre otros.

“La falta de previsión y la improvisación con la que se está actuando no ha dejado otra alternativa que cerrar los ambulatorios de Benadressa, Grupo Reyes, Salera y San Lorenzo, pasando a pertenecer sus pacientes al de Pintor Sorolla. Además, también ha cerrado el centro Constitución, ahora derivado al centro de salud Palleter, el del Raval Universitario, que pasa al Islas Columbretes y el del Grupo Perpetuo Socorro, cuyos usuarios pasan al centro de salud de Almassora. Debemos ayudar, desde la competencia de todas las administraciones, en el aprovisionamiento de todo este material que sigue sin ser suficiente, porque no podemos permitirnos prescindir de todas estas personas que van enfermando al no poder protegerse  a la hora de realizar su trabajo y que, a pesar de ello, siguen cada día al pie del cañón, anteponiendo la vida de todos a la suya propia”, explica.

Para la portavoz popular, “los tests rápidos, no sólo en el ámbito sanitario, son imprescindibles para frenar o al menos tratar de controlar la expansión del virus, igual que los equipos de protección individual para los diferentes profesionales que siguen a primera línea de batalla, las mascarillas, los guantes y los geles de alcohol, todo resulta indispensable cuando estamos atravesando la peor semana de esta pandemia sin que hayamos llegado al pico máximo de contagios. Toda prevención es poca, pero hay que garantizar unos mínimos que a día de hoy no se están cubriendo”.

En este sentido, Carrasco insiste en que la prevención “es la mejor herramienta, por eso, no puede demorarse más el material necesario que siguen reclamando sindicatos y colegios profesionales. La alcaldesa Amparo Marco y el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, deben volcar todos sus esfuerzos en que llegue de inmediato, mañana será tarde”.

Las últimas cifras oficiales hablan de más de 414 sanitarios contagiados en toda la Comunidad Valenciana, rozando los sesenta en la provincia de Castellón, más los que están en cuarentena y otros tantos de servicios de bomberos, policías o guardias civiles. Sin olvidar las residencias de mayores, “que son un foco de los más sensibles, donde las bajas del personal suponen mermar la atención de los más vulnerables, expuestos sobremanera al contagio por coronavirus, y a sus consecuencias más letales, habiéndose producido ya el fallecimiento de una residente y ancianos y personal infectados en una residencia de Castellón”.

En estos momentos la conselleria de Sanidad vigila 45 geriátricos en la Comunidad, seis de ellos en la provincia de Castellón, en los que hay usuarios infectados, como es el de Morella, en Vila-real y en la propia capital de La Plana. En concreto, en estos geriátricos controlados, hay 181 residentes que han dado positivo a nivel autonómico, 13 de ellos en la provincia, y 326 trabajadores en cuarentena, 38 de ellos en la provincia de Castellón.

En definitiva, “debemos contar con mayor capacidad de respuesta sanitaria ante una crisis sin precedentes, que está afectando a tantas personas, llevándose por delante la vida de muchas de ellas. Desde las instituciones se tiene el deber de minimizar el riesgo de contagios y evitar el colapso de nuestro sistema sanitario, para seguir contando con la profesionalidad de todos nuestros médicos, enfermeras y resto de colectivos sanitarios, que merecen un reconocimiento diario por todo lo que están haciendo por nosotros”, concluye Carrasco.