La campaña persigue un doble objetivo: fomentar la adopción canina y prevenir el abandono, reduciendo camadas indeseadas
Un miembro más de la familia, el mejor amigo que demuestra a diario su amor incondicional. Tener un perro supone un compromiso personal de por vida, pero siempre hay alguien que opta por el camino fácil: el abandono. Para evitar camadas indeseadas, reducir los abandonos y luchar contra el comercio ilegal, el Ayuntamiento de Castellón desde la concejalía de Salud Pública, ha lanzado una campaña en colaboración con el Colegio de Veterinarios de la ciudad. A través de la iniciativa, el consistorio subvenciona la esterilización de los canes adoptados en el servicio municipal de recogida.
“La mejor opción es adoptar una mascota que ha sido abandonada”. Así lo expresa la concejala de Salud Pública, Mary Carmen Ribera, quien desmonta además los mitos que circulan en torno a las consecuencias de la esterilización y desmiente a quienes aseguran que un animal abandonado no puede llegar a ser una mascota perfecta: “Unas pautas adecuadas de cuidado y manejo demostrarán que sí puede serlo”. La edil ha agradecido al Colegio de Veterinarios su colaboración en esta campaña pensada con el doble objetivo de fomentar las adaptaciones y prevenir los abandonos reduciendo camadas indeseadas.
Los expertos advierten que, en el caso de la castración, las ventajas sobrepasan ampliamente a los inconvenientes. En este sentido, esta práctica no traumatiza al animal, ni perjudica su salud en general, sino todo lo contrario. La esterilización reduce el riesgo de padecer tumores, infecciones y embarazos psicológicos. La mascota no tiene porqué engordar si se vigila su alimentación. Además, los animales se suelen volver más tranquilos, se evita la atracción continua de los machos hacia las hembras y disminuye el riesgo del robo de mascotas para usarlas como reproductoras.
Así lo refleja la guía de Tenencia Responsable de Animales de Compañía que publica el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Este mismo documento reconoce que las camadas no deseadas suponen la principal fuente de animales abandonados, por tanto, el consistorio pretende con esta campaña avanzar en una tenencia responsable que facilite la integración de las mascotas en el hogar y evitar así el abandono.
Para poder beneficiarse de la campaña, el perro tendrá que haber sido adoptado en el servicio municipal de recogida de animales entre octubre de 2018 y septiembre de 2019. Además, es necesario que esté inscrito en el censo canino y sea mayor de seis meses para realizar la intervención. Una vez cumplidos los requisitos, se acudirá al departamento de Salud Pública del Ayuntamiento para rellenar la ficha de adhesión a la campaña, donde se le asignará uno de los Centros Veterinarios colaboradores. El o la interesada llevará la ficha al centro sanitario y le fijarán así la primera visita, en la que se deberá abonar una cantidad de 50 euros para proceder a la analítica general prequirúrgica.
Los canes ladran contra el abandono y maltrato animal; expresan su felicidad ante las segundas oportunidades. El consistorio habla por ellos: Adopta.
