La moción del equipo de gobierno argumenta que el proyecto tendría un impacto en todas las regiones de la provincia de Castellón, no solo en los municipios donde se prevé su instalación.
El equipo de gobierno de la Diputación de Castellón, compuesto por PSPV-PSOE y Compromís, presentará en la próxima sesión plenaria una moción que pide la suspensión del proyecto del parque fotovoltaico conocido como «Magda» que se pretende instalar en la provincia de Castellón. La moción también solicita la revisión de las objeciones y los informes negativos emitidos por la Generalitat Valenciana, así como el fomento de un proceso de diálogo con los municipios afectados y los actores involucrados para abordar las condiciones que deben cumplirse en la Comunidad Valenciana para la instalación de parques fotovoltaicos y las rutas de evacuación de la energía.
Se trata de una postura coherente con la comunicación enviada al Gobierno de España hace un año, en la que se informó de la aprobación de una declaración institucional que hizo explícito el rechazo al proyecto «Magda» con el voto unánime de todos los grupos políticos presentes en el pleno.
La moción del equipo de gobierno argumenta que el proyecto tendría un impacto en todas las regiones de la provincia de Castellón, no solo en los municipios donde se prevé su instalación: Coves de Vinaromà, Vilanova d’Alcolea, Torre d’en Doménec, Benlloc, Alcalà de Xivert, Torreblanca, Vall d’Alba, Cabanes, Vilafamés, Sant Joan de Moró, Borriol, Castelló de la Plana y Almassora.
Los socios del gobierno entienden que la generación de energía es uno de los mayores desafíos de nuestra sociedad, pero hacen hincapié en el rechazo generalizado que ha causado el proyecto «Magda» en el territorio debido a su incompatibilidad con la protección del medio ambiente y el desarrollo económico de las regiones afectadas. Consideran que la iniciativa es desproporcionada y promueve un modelo de generación de energía eléctrica que va en contra de los principios del desarrollo sostenible.
Defensa del territorio
El equipo de gobierno de la Diputación afirma que el proyecto tiene un gran impacto en la planificación territorial, en los paisajes protegidos y en el patrimonio cultural y etnológico (por su cercanía con el barranco de la Valltorta, que está reconocido como patrimonio de la humanidad). Además, afecta a las industrias existentes, la agricultura de almendros y la flora y fauna.
La moción presentada por el PSPV-PSOE y Compromís destaca que la zona afectada incluye municipios en riesgo de despoblación, por lo que las administraciones deben ser especialmente sensibles con ellos.
En la moción se insta a la Diputación a poner sus servicios técnicos a disposición de los ayuntamientos para brindarles toda la ayuda necesaria.
