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Tras el accidente, la víctima, gravemente herida, logró arrastrarse 300 metros a través de un campo hasta su domicilio, donde solicitó ayuda
El Subsector de Tráfico de la Guardia Civil de Alicante, tras una exhaustiva investigación, ha logrado identificar al conductor del vehículo que atropelló a un viandante en el municipio de Aspe, dejándolo abandonado en el lugar del siniestro. Todas las actuaciones han sido puestas en conocimiento del Juzgado de Guardia del Partido Judicial de Novelda.
Las investigaciones comenzaron en la madrugada del 21 de diciembre, cuando el servicio de emergencias 112 alertó al Centro Operativo de Tráfico (COTA) de Alicante sobre un atropello ocurrido en la carretera CV-825 de Aspe. Al llegar, una patrulla del Destacamento de Tráfico de la Guardia Civil de Alcoy constató que una persona había sido atropellada, sufriendo heridas graves, y que el vehículo causante del siniestro se había dado a la fuga.
Durante la inspección inicial, se recuperó un espejo retrovisor y varios vestigios que ayudaron a avanzar en la investigación. A pesar de sus graves lesiones, la víctima logró arrastrarse 300 metros a través de un campo hasta llegar a su domicilio, donde pudo pedir ayuda y fue trasladada al Hospital General Universitario de Elda, donde fue operada de urgencia.
La Unidad de Investigación de Seguridad Vial (UNIS), encargada de las diligencias, identificó al vehículo implicado y al conductor fugitivo, un hombre de 34 años, vecino de Monforte del Cid. Además, se comprobó que el conductor había reparado su vehículo, adquiriendo un espejo retrovisor nuevo.
El 10 de enero, al concluir la investigación, el Grupo de Investigación y Análisis de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (GIAT) citó al conductor para ser investigado por un presunto delito de abandono del lugar del accidente. Las diligencias fueron enviadas al Juzgado de Guardia de Novelda.
Durante la investigación, la Policía Local de Monforte del Cid prestó su apoyo.
La Guardia Civil recuerda a la ciudadanía que abandonar el lugar de un accidente en el que se causan lesiones graves puede acarrear penas de prisión de 6 meses a 4 años y la privación del derecho a conducir de 1 a 4 años.