Los investigados usaron hasta 8 monederos diferentes para procurar que se perdiese la trazabilidad de la criptomoneda estafada.
La Policía Nacional de Castellón, tras 3 meses de investigación, ha procedido a la recuperación y puesta a disposición judicial de una gran parte de criptomonedas procedentes de una estafa famosa de falsas inversiones de criptomoneda valoradas en un inicio en sesenta mil euros, que tiene sus orígenes en la publicación masiva por Internet de publicidad para invertir una pequeña cantidad de dinero en acciones de empresas de gran prestigio, asegurando una alta rentabilidad en un plazo cortísimo de tiempo.
Conforme ha informado este cuerpo de seguridad en un comunicado, la víctima sostenía contacto telefónico de forma frecuente con una persona que formaba una parte de esta organización, quien le mostraba en una plataforma falsa de qué manera estos primeros doscientos cincuenta euros invertidos en activos de una destacada empresa se transformaban de manera rápida en provechosas ganancias, usando para esto un software demo simulador de ‘trading’.
Una vez ganada la confianza de la víctima, la persuadieron a fin de que se abriese una cuenta en un Exchange para operar con criptomoneda, se instalase en su computador un programa de acceso remoto y adquiriese Bitcoin de sesenta mil euros, teniendo de esta forma un control total para trasferir la criptomoneda adquirida a distintos monederos creados y controlados por los delincuentes.
Los investigados usaron hasta 8 monederos diferentes para procurar que se perdiese la trazabilidad de la criptomoneda estafada, mas, tras examinar meticulosamente los registros en la Blockchain sobre las transacciones ilegales, los técnicos de la investigación consiguieron identificar las dos cuentas de destino final pertenecientes a un conocido Exchange con sede en Reino Unido, pudiendo bloquear y recobrar una gran parte de los criptoactivos adquiridos merced a la eficaz colaboración y predisposición por la parte de los Juzgados de instrucción de Castellón.
Por último, para el total esclarecimiento de los hechos y la reparación del daño económico ocasionado a la víctima, se ha pedido colaboración judicial internacional para la ubicación de los dos autores de los hechos situados en Albania y Reino Unido y comienzo de las oportunas acciones penales.