Este proceso ha implicado que Pedro Sánchez mantuviera conversaciones intensas y difíciles acuerdos con partidos nacionalistas e independentistas.
Pedro Sánchez ya tiene una fecha fijada para su intento de ser investido presidente del Gobierno. Después del fracaso de Alberto Núñez Feijóo, presidente del Partido Popular, en su búsqueda de una mayoría parlamentaria que le permitiera liderar el Ejecutivo en los próximos cuatro años, es el turno del candidato socialista.
El debate y la votación de investidura están programados para los días 15 y 16 de noviembre.
Este anuncio ha sido realizado por la presidenta del Congreso de los Diputados, Francina Armengol, poniendo fin a las críticas constantes del bloque conservador, que cuestionaban la demora en la fijación de una fecha para que Sánchez se sometiera a la investidura. En este contexto, Sánchez se presentará ante los parlamentarios de la cámara el miércoles y el jueves de esta misma semana en busca de obtener el mayor número de votos posible.
De acuerdo con lo explicado por la presidenta del Congreso, el debate comenzará con la intervención del candidato a la Presidencia a las 12 horas del miércoles. Luego, se desarrollarán las intervenciones de los grupos parlamentarios de mayor a menor número de parlamentarios, a lo largo del miércoles y el jueves, culminando con la votación el mismo jueves.
Armengol ha informado a todos los grupos parlamentarios sobre las fechas y el proceso, y los portavoces participarán en una reunión este martes para conocer en detalle cómo se llevará a cabo el procedimiento.
En este contexto, Sánchez se presentará ante los parlamentarios de la cámara el miércoles y el jueves de esta misma semana, buscando obtener el mayor número posible de votos. La investidura del líder socialista se considera, en principio, segura. Desde las elecciones generales del 23 de junio, el presidente en funciones ha estado negociando con varios partidos para construir una mayoría suficiente que permita una nueva legislatura.
Este proceso ha implicado que Pedro Sánchez mantuviera conversaciones intensas y difíciles acuerdos con partidos nacionalistas e independentistas, en particular con ERC y Junts per Catalunya. Al mismo tiempo, el bloque compuesto por partidos de derecha y extrema derecha ha ejercido una oposición firme para denunciar las negociaciones de Sánchez con los líderes catalanes. Esta oposición ha resultado en protestas en diversas partes de España, donde se han producido enfrentamientos violentos entre grupos ultraderechistas y la Policía.
Estos eventos fueron destacados por la presidenta Armengol durante el anuncio de las fechas de la investidura. Ella expresó,
Soy una persona que siempre ha defendido y siempre defenderá todas las manifestaciones, y creo en el espacio que brinda a los ciudadanos para expresar sus opiniones, sin importar cuáles sean. Sin embargo, quiero resaltar dos cuestiones importantes: tengo una fuerte creencia en el diálogo y el consenso como medios para unir a los españoles, y me parece que algunas declaraciones que hemos escuchado en estos días por parte de diferentes líderes políticos no promueven la unidad, sino la división y la separación. Es esencial valorar más que nunca la democracia, el diálogo y los valores como medios para entendernos.
Subrayó Armengol, quien también aprovechó la ocasión para «condenar de manera categórica cualquier forma de agresión, violencia y desobediencia al orden público, tal como se ha observado en las calles de España en estos últimos días».
Mañana martes, se llevará a cabo una reunión de la Mesa del Congreso, en la cual podría calificarse la ley de amnistía si finalmente se registra este lunes, como lo planean los socialistas. El texto de la ley fue enviado a los socios de investidura, con la intención de firmar la proposición de ley, después de las 11:00 horas de esta mañana.
Todos ellos desean analizarlo detenidamente antes de proceder a firmar. El acuerdo con los independentistas implica que la normativa sea calificada antes de la investidura, como un paso inicial en su proceso de tramitación. Según Armengol, si se registra como se tiene previsto este lunes, tras obtener la aprobación de los socios, «seguirá el curso normal como cualquier otra iniciativa».
La investidura de Pedro Sánchez se llevará a cabo en la primera votación con mayoría absoluta, después de cerrar acuerdos parlamentarios con todos los partidos, excepto el PP, Vox y el diputado de UPN. Esto suma un total de 179 votos y una diferencia de ocho escaños con respecto al bloque de oposición. Este es un avance significativo en comparación con 2019, cuando el candidato socialista obtuvo 167 apoyos frente a 165 y fue investido en la segunda votación con mayoría simple.
Tras cerrar el acuerdo con Junts el jueves pasado, al día siguiente se sumaron los votos de PNV y CC. Junto con ERC, EH Bildu y BNG, completan el bloque de apoyo parlamentario a Sánchez.
El texto de la ley de amnistía no incluirá casos de corrupción. Durante todo el fin de semana, se han estado ajustando aspectos «técnicos» de la norma. El ministro de la Presidencia en funciones, Félix Bolaños, delimitó el alcance de la ley el viernes, «a todas las personas con causas penales, administrativas o contables derivadas o relacionadas con el proceso soberanista», desde 2012 hasta 2023, según lo establecido en el acuerdo con Junts.